Gracias a una inscripción, hoy desaparecida, sabemos que el arquitecto fue Odón (o Eudes) de METZ .Las obras se iniciaron en el 790, y en el 797 se culminaba la cubierta del octógono central, siendo consagrada por el papa León III en el 805, dedicándola a Santa Maria.
Planta de la capilla. Se concibió como una planta centralizada en torno a un octógono central al que rodea otro hexadecagonal (de 16 lados) y entre ambos un deambulatorio.
Interior (reconstrucción). Por encima del deambulatorio hay una tribuna que abre al espacio central mediante unos arcos y a su vez este espacio central se eleva por encima de las tribunas y se cubre con una bóveda de paños.
Planta de la capilla. Se concibió como una planta centralizada en torno a un octógono central al que rodea otro hexadecagonal (de 16 lados) y entre ambos un deambulatorio.
Interior (reconstrucción). Por encima del deambulatorio hay una tribuna que abre al espacio central mediante unos arcos y a su vez este espacio central se eleva por encima de las tribunas y se cubre con una bóveda de paños.
El modelo del octógono de esta capilla recuerda a San Vital de Rávena. Es un edificio centralizado con otro envolvente. Cuando en el año 790 se comenzó la capilla, Carlomagno solicitó al Papa que tomaran los materiales para su construcción de Rávena, por lo que no es extraño que viera los edificios de allí, y quedaran impresionados. Hay sin embargo diferencias entre ambos.
La capilla palatina representa un paso atrás, porque en San Vital los arquitectos emplearon unos recursos de una sutileza arquitectónica que a los de Aquisgrán se les escaparon totalmente: 1. Por ejemplo en Aquisgrán la molduración horizontal está bastante marcada, con lo cual el sentido ascensional del edificio queda bastante cortado. 2. El arquitecto de San Vital de Rávena no hace líneas rectas, son exedras en la planta del octógono y esto provoca una mayor ligereza, por lo que se gana en dinamismo. Sin embargo, en la capilla de Aquisgrán si son rectas. Esto tampoco supieron captarlo los arquitectos carolingios. 3. En San Vital el ábside no está a eje en relación con el pórtico de entrada (diapo de la derecha) que da mayor libertad al edificio, evitando el encorsetamiento. En Aquisgrán sí está a eje con el pórtico.
La capilla palatina representa un paso atrás, porque en San Vital los arquitectos emplearon unos recursos de una sutileza arquitectónica que a los de Aquisgrán se les escaparon totalmente: 1. Por ejemplo en Aquisgrán la molduración horizontal está bastante marcada, con lo cual el sentido ascensional del edificio queda bastante cortado. 2. El arquitecto de San Vital de Rávena no hace líneas rectas, son exedras en la planta del octógono y esto provoca una mayor ligereza, por lo que se gana en dinamismo. Sin embargo, en la capilla de Aquisgrán si son rectas. Esto tampoco supieron captarlo los arquitectos carolingios. 3. En San Vital el ábside no está a eje en relación con el pórtico de entrada (diapo de la derecha) que da mayor libertad al edificio, evitando el encorsetamiento. En Aquisgrán sí está a eje con el pórtico.
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